Thursday, February 09, 2006

Existen días donde todo parece más difícil, más extrañamente complicado.
Demasiado haraposa nos empieza a resultar la aburrida verdad de la piedra y los humanos, la de los múltiples tropezones y los aprendizajes temporales. Tarea que resulta demasiado sencilla en voz ajena.

Jamás me sentí más loca o menos brillante por gustarme el fuego. La caliente sensación de que algo repentino pudiera alterar mínimamente esa diligente frialdad de la que me hice cargo con tan solo quince años.
Me encanta ponerme las enormes y viejas botas que animan a mis pies a salir a la calle sin darme cuenta, y notar esa cálida sensación de incomodidad que a mi tanto me enloquece.

Tengo un miedo inexplicable a despertar una mañana y no sentir que quemo. Tengo miedo a no poder quemar a nadie nunca más.
Miedo a soplar muy fuerte y escapárseme sin querer un adiestrado golpe de vaho congelado.

Los días como hoy, esos que explicaba antes, van siempre acompañados de pequeños escalofríos que pretenden, diría yo, alejarme de este sitio tan caliente donde yo me he acomodado.
Y cuando a punto están de conseguirlo, aparece, como siempre, esa sensación que sin saber como empezó, ya todos le han puesto un nombre distinto y una forma diferente de aparecer.

Y de repente, como un golpe de aire, un tacto torpemente afeminado me devuelve a mi lugar.

36 Comments:

Blogger Ella said...

Mi querida y admirada Isthar, la hice marearse por mi calle por culpa de una torpe inseguridad que me caracteriza.

No volverá a pasar. Gracias igualmente por publicar su fiel comentario en cualquiera de los otros textos.

Gracias Isthar.

12:19 PM  
Blogger Isthar said...

En esos días extraños en que todo parece pesar más y donde cada paso parece más corto, se cuela por las rendijas el frío viento del norte. Por eso a veces sientes escalofríos, por eso en ocasiones aflora el miedo a que el fuego se apague.

Pero no temas, siempre habrá alguna mano cálida dispuesta a llevarte a tu sitio, a ese rincón donde seguirás quemando y haciendo quemar a otros, de eso no me cabe la menor duda.

Un abrazo verdaderamente cálido

Republico el comentario y aprovecho para decirte que la admiracion y el cariño es completamente recíproco. Me encanta perderme en tus letras, es uno de mis pequeños palceres :)

12:37 PM  
Blogger Estepario said...

yo siempr ehe creido en las oscilaciones y en los equilibriso, aunque parezca un poco contradictorio, pero en promedio las oscilaciones son equlibrios.

En este caso solo dejarse llevar por lo que indique el alma. Frio cuando las cosa parecen demasiado mal y caliente cuando todo esta bien, frio cuando dejan de estarlo, caliente cuando me encuentro una luz y asi sucesivamente...

4:02 PM  
Anonymous Anonymous said...

Adoro andar entre sus palabras.

3:30 PM  
Blogger Cargol said...

Precioso o que escribes, cmo siempre. Continua quemando los días difíciles, y olvida el miedo antes de que te hiele.

Besos.

9:42 AM  
Blogger Pow said...

Calor y frío. Extremos que conducen a la tibieza. Algunos preferimos el frío, otros el calor, pero el termostato se empeña en regular la temperatura corporal a 36 grados.
Maldita maquinaria perfecta que nos sustenta...

12:58 AM  
Anonymous Anonymous said...

A veces me gustaría descrubrir cómo lo haces, pienso, me concentro, miro al futuro y digo "sólo necesito tiempo, lo descubriré". Luego me paro y me doy cuenta de que nunca lo conseguiré y me doy cuenta de que en el fondo sé que no quiero averiguarlo.

Un Samurai.

2:52 PM  
Blogger Art said...

Fuego. Hipnótico, atrayente, peligroso. Toda una delicia leerte. Saludos.

2:39 PM  
Anonymous Anonymous said...

y yo que me siento como una bolita de fuego atrapada en un mundo de hielo, que vaga entre soles buscando un calor suficientemente intenso como para liberar el fuego que llevo dentro, pero cuando ello esta a puto de suceder, como por arte de magia, el hielo se convierte en piedra y ya no hay quien lo funda.

11:25 PM  
Anonymous Anonymous said...

No te alejes nunca de la hoguera.

Abrazo orgiástico.

10:52 AM  
Blogger JoanAlbor said...

Me quedo con el placer de saber que en esos momentos en que el frío te hace temblar siempre aparece "eso a quein cada uno le ha puesto un nombre" que con solo nortarlo a tu lado intuyes su calor y hace revivir el tuyo. Precioso texto y precioso tambien el calor que desprenden tus palabars y las de Isthar :) una abraçada

1:57 PM  
Blogger David Saä V. Estornell said...

desmembrada y bruta como siempre mi estimada amiga,



Voy a agotar mis momentos leyéndo los anteriores postes... cuídate.

12:44 PM  
Anonymous Anonymous said...

Este blog se repite más que el ajo.

ZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZZ

2:32 PM  
Anonymous Anonymous said...

Actualice.

10:23 AM  
Blogger ángel said...

Abraxas era el nombre del dios que contemplaba Demián dentro del fuego de la inolvidable novela de Herman Hesse. Una fascinación, la de las llamas, compartida.


Saludos...

6:13 PM  
Anonymous Anonymous said...

Hola, me alegro de haberte ayudado. Yo también busqué durante mucho tiempo la canción de Marte Menguante.

El fuego que nos mantiene vivo nace de nuestro interior y se mantiene en el tiempo gracias a nuestras relaciones de los demás :-)

11:08 AM  
Anonymous Anonymous said...

Perjura.

Álvaro

5:43 AM  
Blogger Pow said...

Y yo que esperaba encontrar una vuelta en forma de palabras de magia blanca...
Seguiré esperando, a paciente hay pocos que me ganen :(

5:34 AM  
Anonymous Anonymous said...

Esta noche no consigo dormir así que he salido a pasear. Recordé que vives cerca y giré unas cuantas esquinas hasta llegar a esta calle. He vuelto a ver las farolas sucias y los balcones de los que cuelgan las plantas, el buzón y las cornisas. Me paré delante de cada portal y estudie todos los pisos pero no me atreví a despertar a tus vecino sólo para hablar un rato contigo, me pareció egoista.

Por eso caminé calle arriba y calle abajo varias veces y pensé que como me sigue hechizando este lugar igual que el primer día que me perdí por aquí, quizá alquile un piso en esta calle. Sólo por un tiempo, para ver si un día tengo la suerte de chocarme contigo al salir a tu calle o de verte apoyada en el balcón en una noche de insomnio.


Un samurai.

6:03 PM  
Blogger Isthar said...

Vuelve... anda.

Hazme feliz :)

12:56 PM  
Anonymous Anonymous said...

http://ewancient.lysator.liu.se/pic/art/w/i/william2/cold.jpg
se muere de pena, tiene frio, a su lado hay cerillas, pero nunca jugara con fuego.

2:27 PM  
Blogger Art said...

Si actualizas no me enojo, jejeje.

3:40 PM  
Anonymous Anonymous said...

Me alegra saber que aún hay gente que es capaz de mantener ardiendo la llama.
El calor que nos alimenta y las chispas que hacen brotar nuestras palabras, ahogadas todavia por el hielo.

Un beso!

8:05 AM  
Anonymous Anonymous said...

Cómo te echo de menos, qué jodida eres. No sé quién te crees para hacerme esto...

11:05 AM  
Anonymous Anonymous said...

Por favor...vuelve...

8:44 AM  
Anonymous Anonymous said...

¿Nos abandonó?

1:55 PM  
Anonymous Anonymous said...

buenas noches.

3:17 PM  
Anonymous Anonymous said...

A veces es como intentar caminar sobre el agua. A veces es como intentar respirar humo, o como querer ver a través de las paredes. A veces es como pretender adivinar el curso del viento. Y siempre, cuando todo se vuelve tan confuso que parece a punto de esfumarse, cuando el pánico se adueña del escenario como en un bello sueño que sabe que se va a desvanecer, siempre sucede algo que trae un amanecer tras una noche de soledad y añoranza.

Es como haber muerto tantas veces por su causa, y por su causa haber resucitado. Como si su mirada iluminase el mundo, y cada parpadeo fuese como un eclipse de angustioso olvido.

Y él se pregunta qué sucedería si alguna vez no hubiese amanecer, no hubiese resurrección, si aquellos ojos que le reviven se cerrasen para siempre y no le volviesen a mirar.

Da miedo.

7:39 AM  
Blogger pab said...

Nos debes una reseña de los miles de minutos que se han esfumado desde el instante en que escribiste la última de estas líneas hasta... hasta ahora mismo.

Entreguese en el formato conveniente y con la mayor prontitud.

6:08 AM  
Blogger Ella said...

Tengo ganas, incluso diria que inmediatas.

4:09 PM  
Blogger Pow said...

Como aquí no pone la fecha es imposible saber cuando tenías ganas inmediatas de contar... Debería haber estudiado arqueología de los momentos o algo así :(

12:26 PM  
Anonymous Anonymous said...

Necesito que me vuelvas a quemar.


Un samurai.

5:26 PM  
Blogger Peter said...

El samurai necesita un extintor. Los demás un poquito de aire fresco, a ver si se oxigena el fuego y arden bien.

Salud, ella.

!D

2:04 AM  
Blogger Isthar said...

Algunos te seguimos esperando, confiando en que una mañana despiertes y el gusanillo de las letras vuelvan a inundarte ¡¡y las compartas!! :)

8:15 AM  
Blogger Manos de Ámbar said...

Cada mañana, cuando me despierto, me pregunto si habrás vuelto.

Nunca esperé algo tantas veces ni durante tanto tiempo.

4:53 PM  
Blogger Andrés said...

Voy a ver si puedo hacer fuerza para que vuelvas...
Es injusto que nos prives de tus palabras...

Gracias por pasar por casa...

Gracias por las palabras

Besos

A.-

11:59 PM  

Post a Comment

<< Home